Últimamente se ha puesto «de moda» la famosa camiseta con el cinturón de seguridad pintado, cuyo objetivo es intentar engañar a las cámaras de la DGT. Repasamos este y otros casos de técnicas anti-multas que (atención, spoiler) no funcionan, así como las sanciones aplicadas a estos comportamientos, que que a menudo superan la cuantía de la multa original.
Esta prenda tramposa ha vuelto a primera plana con la puesta en funcionamiento en nuestro país de las cámaras para controlar el uso del cinturón de seguridad. La Guardia Civil ya ha avisado de que se trata de una treta inútil, pues las cámaras permiten distinguirlas con claridad. Prescindir del cinturón de seguridad acarrea multa de 200 euros y 3 puntos del carnet de conducir.
Se trata de casos en los que el conductor, tras acumular varias multas por una importante cuantía, decide denunciar su robo para tratar de eludir su responsabilidad. Recientemente hemos conocido el ejemplo de una vecina de Almería.
Había vendido previamente el vehículo, sin contrato ni cambio de titularidad. Al recibir la notificación de las multas y no poder justificar la venta, decidió simular el robo del vehículo. En este caso el delito por falsa denuncia puede acarrear penas de prisión de entre 6 meses y 2 años.
En este caso el objetivo es usar (incorrectamente) el carril VAO, que podemos encontrar en ciudades como Madrid, Barcelona o Granada. La normativa de estas ciudades permiten circular por este carril a aquellos vehículos que llevan dos o más pasajeros.
Hemos conocido ya varios casos de pícaros conductores que, a pesar de no llevar acompañante alguno, han tratado de simularlo con maniquíes o muñecas hinchables. Por supuesto, el truco en estos casos no ha surtido efecto y los infractores han sido multados con al menos 200 euros, más el coste del muñeco.
Modificar nuestra matrícula intencionadamente tiene sanciones de 6.000 euros y 6 puntos del carné, y penas de cárcel de 2 años. La última treta que hemos conocido es usar unas pegatinas especiales que supuestamente impiden que las cámaras de los radares fotografíen correctamente nuestra matrícula.
Estos adhesivos modifican levemente el aspecto de la placa, pero algunos caracteres no se mostrarían en la imagen. Un gesto costoso e inútil pues, además del precio de las pegatinas, acabaremos siendo sancionados. La DGT ya ha avisado de que siempre hay formas de terminar identificando nuestro vehículo.
Las películas de acción han servido de inspiración y desde hace años es posible comprar por internet absurdos sistemas para tapar la matrícula. Uno de ellos nos permite bajar una pequeña persiana sobre nuestras placas por control remoto.
Otro, más imaginativo, supuestamente detecta el flash de la cámara y lanza un segundo flash que trata de contrarrestar el primero. En ambos casos, el delito puede exceder el de falsedad documental y superar los 2.000 euros de multa.
Hemos tratado el tema previamente. Existen diferentes sistemas y dispositivos cuyo objetivo es avisarnos de la proximidad de un radar. El problema es que muchos son ilegales, pues se basan en tecnologías que pueden afectar al funcionamiento del radar.
Si lo que queremos es un dispositivo que nos avise de los radares y tener la plena seguridad de estar dentro de la legalidad, lo mejor es optar por Coyote. Los dispositivos Coyote nos avisan de todos los tipos de radares, basándose para ello en las publicaciones oficiales de la DGT, y en la propia comunidad Coyote.
Imágenes | iStock/vrcraft,Guardia Civil, Coyote
En My Coyote | ¿Buscas detectores de radar? No te la juegues: usa Coyote
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