Los fabricantes y las marcas especializadas en equipamiento de automóviles están redoblando esfuerzos para mejorar la seguridad de los conductores. Entre las innovaciones más prometedoras del sector, destacan los neumáticos conectados, que pronto podrían incorporarse a nuestros coches particulares. Te explicamos todo sobre estos neumáticos inteligentes cuyo objetivo es revolucionar la conducción.
Los neumáticos conectados están diseñados para comunicar en tiempo real información sobre su funcionamiento y estado. Para ello, incorporan sensores de presión con un chip RFID (Identificación por Radiofrecuencia).
Gracias a este chip, los datos recogidos se comparten con otros sistemas del vehículo, que pueden alertar al conductor (o a un centro de mantenimiento de flotas) en caso de fallo o peligro potencial. Según el sistema, esta información está disponible a través de una app específica (en smartphone y/o tablet) o se muestra como una alerta directa en el salpicadero.
Los neumáticos conectados informan al conductor sobre:
Pero los fabricantes trabajan ya en nuevas funcionalidades. Con tecnologías aún en desarrollo, buscan mejorar, por ejemplo, el rendimiento del sistema de frenado automático de emergencia, que podría comunicarse directamente con los neumáticos conectados. Con la App de Coyote
conduzco con más seguridad y evito multas, gracias a su sistema de alertas en tiempo real sobre radares y zonas de peligro en mi ruta.
Actualmente, los neumáticos conectados se usan sobre todo en flotas de camiones para facilitar el mantenimiento predictivo. Pero no es el único ámbito: también están presentes en vehículos de obra civil y en maquinaria pesada para construcción.
Aunque los coches particulares aún no incorporan neumáticos conectados, varios grandes fabricantes ya están trabajando en el desarrollo de modelos compatibles.
El año pasado, Pirelli y Bosch anunciaron una colaboración para lanzar neumáticos conectados destinados al mercado de turismos. Más recientemente, durante el CES de Las Vegas 2025, Goodyear presentó nuevos modelos de neumáticos inteligentes capaces, entre otras cosas, de detectar carreteras mojadas o con hielo.
Por ahora, no se ha comunicado ninguna fecha oficial de comercialización.
Dato interesante: en 2018, Michelin desarrolló un sistema llamado Track Connect, orientado a coches deportivos en circuito. Esta tecnología dejó de comercializarse en 2023.
Esta tecnología permite una vigilancia proactiva del estado de los neumáticos, lo que mejora significativamente la seguridad: recibirás alertas en caso de riesgo de pinchazo o desgaste excesivo que pueda derivar en accidente.
Además, al gestionar mejor el desgaste, los neumáticos conectados pueden tener un beneficio económico (más durabilidad) y ayudar a reducir la contaminación generada por partículas de caucho.
Por último, algunos fabricantes creen que los neumáticos conectados podrían mejorar el confort de conducción, al permitir un ajuste más preciso del control de estabilidad (ESP) o del sistema de tracción, reduciendo el riesgo de derrape.
Sigue todas las novedades sobre esta tecnología en el blog de Coyote.
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